El Banco Popular Dominicano cerró el ejercicio del
año 2017 con importantes desarrollos que le fortalecieron y contribuyeron al crecimiento
de los sectores productivos del país, según las cifras preliminares que el
presidente de la organización financiera, señor Manuel A. Grullón, presentó
durante un encuentro con ejecutivos de medios de comunicación, celebrado en la
Torre Popular.

En este sentido, los activos totales del Banco Popular alcanzaron el año
pasado los RD$381,470 millones, experimentando un aumento de 14%, equivalentes
a RD$46,948 millones más sobre lo obtenido al término de 2016.

El presidente del Banco Popular y de Grupo Popular resaltó que este
resultado se sustenta sobre dos elementos claves, como son el incremento del
volumen de negocio y la reducción de gastos operacionales, manteniendo al mismo
tiempo la calidad de los activos y el índice de riesgo más bajo de la banca dominicana,
que se sitúa en 0.85% de la cartera, con una cobertura de 241.43% sobre esa
cartera vencida.

Aumentan los
préstamos a sectores productivos

El presidente del Popular informó que la cartera de préstamos neta cerró
el año con un balance de RD$244,744 millones, habiendo crecido las facilidades
crediticias en RD$32,079 millones con relación a 2016.

Los depósitos totales se elevaron a RD$305,665 millones, superando en
RD$37,449 millones el valor alcanzado al final del ejercicio fiscal de 2016.

Según anunció el ejecutivo bancario, la entidad financiera presentó
utilidades brutas por un valor de RD$8,450 millones, que luego de rebajar el
monto destinado al pago del Impuesto Sobre la Renta, ascendente a RD$2,062
millones, resultaron en utilidades netas por valor de RD$6,388 millones.

Dijo que estos logros financieros se alcanzaron manteniendo un elevado
nivel de solvencia, que supera el límite mínimo requerido por las regulaciones
vigentes, con un patrimonio técnico de RD$48,358 millones.

Además, el señor Grullón expresó que el capital del Popular presenta
holgura y suficiencia para seguir respaldando el desarrollo de las actividades
productivas del país, gracias a la reinversión de las utilidades en 2016 por un
monto de RD$5,414 millones y a la colocación de RD$2,000 millones de deuda
subordinada.

Agregó también que, gracias a sus aportes a la sociedad, su cultura de
servicio y el modelo de buenas prácticas de Gobierno Corporativo, este accionar
ha sido reconocido, un año más, por diversas publicaciones nacionales e
internacionales, que repetidamente han distinguido al Popular entre los mejores
bancos de la región del Caribe y Centroamérica, así como por ser la empresa más
admirada y el mejor sitio para trabajar del país.

Novedosas iniciativas
de negocio

En 2017, de acuerdo a lo expuesto por el presidente
del Grupo Popular y del Banco Popular, la organización financiera continuó
innovando en canales, servicios y productos financieros, apoyados en una
importante inversión tecnológica, para dar servicio a sus casi 900 mil clientes
digitales.

Como resultado del modelo de transformación digital
que el Banco Popular lidera en el mercado dominicano, la entidad bancaria lanzó
en 2017 nuevas funcionalidades para su App Popular, convirtiéndose en la
primera aplicación financiera local con Token Digital integrado. Asimismo, desde
esta aplicación se puede solicitar el desembolso de préstamos y la venta de
productos. Unos 265 mil usuarios utilizan App Popular para sus transacciones
bancarias.

La entidad financiera fue también pionera el año
pasado en la presentación y despliegue en el mercado de las tarjetas de crédito
de pago sin contacto, que cuentan con la tecnología inalámbrica NFC (Near Field
Communications), la cual se está convirtiendo en el estándar de pago a nivel
mundial.

Desde mediados de 2016, Servicios Digitales Popular,
filial del Grupo Popular, ya cuenta a través de su marca comercial AZUL con
todas sus terminales de pago adaptadas a esta nueva tecnología.

Se presentaron también soluciones innovadoras para los clientes
empresariales a través de la plataforma de servicios de Pagos y Recaudos, orientada a incrementar los niveles de
eficiencia y competitividad.

El Banco Popular continuó su apoyo al segmento de
nuevos clientes jóvenes, con un paquete exclusivo de productos con condiciones
preferenciales e iniciativas que apoyan el emprendimiento y la innovación, como
son el programa Impúlsate o el maratón de diseño Challenge Popular.

Los jóvenes que buscan en el Popular su primer
aliado financiero representan ya el 27% de todos los clientes del banco y un
6.9% del volumen de negocio.

Inversión social

El presidente del Banco Popular y del Grupo Popular expresó ante los
ejecutivos de medios de comunicación cómo la organización financiera impacta no
solo en la vida de sus clientes con sus productos y servicios, sino en cientos
de miles de personas a través de sus iniciativas con impacto social y
las acciones de responsabilidad social empresarial y sostenibilidad.

En este orden, destacó las más de 32,700 personas que han participado en
las charlas y talleres de educación financiera “Finanzas con Propósito” o los
más de 300,000 clientes, muchos no bancarizados, que realizan sus operaciones
financieras a través de los más de 1,980 comercios afiliados a la red Subagente
Popular. En 2017, este canal de inclusión financiera superó el millón de
transacciones.

En cuanto a la inversión socialmente responsable, el señor Grullón
afirmó que el Grupo Popular apoyó diversas iniciativas de sostenibilidad y
responsabilidad social, entre ellas, programas en favor de la ecoeficiencia como
sus oficinas fotovoltaicas, el respaldo al Plan Sierra mediante jornadas de
reforestación a cargo de empleados, así como la educación preuniversitaria y
universitaria para jóvenes de escasos recursos y los estudios de posgrado de la
Cátedra de RSE y Sostenibilidad “Alejandro E. Grullón E.”.

Además, la institución colaboró con programas de salud por medio de la
alianza Sanar una Nación, al igual que llevó a cabo aportes humanitarios al COE
para los damnificados de los huracanes Irma y María, la construcción de
acueductos comunitarios y minihidroeléctricas, y acciones de apoyo al arte y la
cultura, que favorecen el desarrollo humano.