El cierre del primer cuatrimestre de 2025 ha dejado números para el negocio turístico en Cuba que confirman que solo un milagro salvará a las autoridades de hacer el ridículo por un año más, al incumplir sus pronósticos de veraneantes extranjeros.

La estatal Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI) dio a conocer  las cifras de turistas internacionales llegados a Cuba entre enero y abril de 2025, que muestran una caída del 27,6% del total de clientes, en un periodo en el que se reportaron 741.106 veraneantes.

El cuarto mes del actual año dejó 169.334 viajeros, la peor cifra de 2025, por detrás de los 196.004 de enero, los 178.263 de febrero y los 197.505 de marzo. Este primer tercio del año no luciría tan mal si se considera que con él cierra la llamada “temporada alta”, que comienza en noviembre y es en la que se producen la mayor cantidad de visitas a los hoteles del país.

La Habana espera recibir 2,6 millones de visitantes al cierre de 2025, pero al ritmo actual, cerraría con alrededor de 2.200.000 turistas, cifra similar a la de 2024.

La abrupta caída de la demanda desde Canadá y Rusia, primer y cuarto mercados turísticos de la Isla, incide en la debacle. Rusia ha descendido del tercer al cuatro puesto en estos meses.

De Canadá llegaron a Cuba 349.149 veraneantes en el periodo, un 30,3% menos que los 496.568 de los mismos meses de 2024. En cuanto a Rusia, el derrumbe es de casi el 48%: 46.170 viajeros este cuatrimestre, de los 88.313 de enero a abril de 2024.

El arribo de cubanos residentes en el extranjero cerró con 78.930 personas, de los 100.045 de 2024, mientras que Estados Unidos dejó de emitir unos 10.000 viajeros.

El resto de los países mayores emisores también quedaron por debajo del año pasado: Alemania, Francia, México, Argentina, España e Italia decrecen entre un tres y un 18%.