Cada país tiene algo de especial su cultura, arquitectura, gastronomía, bebidas, etc. pero se han imaginado alguna vez visitar África y probar sesos de mono u otro animal exótico o silvestre.

En esta oportunidad Inca Rail te presenta una lista de países que tienen comida y bebida exótica las cuáles no deberías dejar de probar alguna vez en la vida y harán que tu visita a estos lugares se convierta en una experiencia única.

Japón

• El veneno del pez globo es 1,200 veces más mortal que el cianuro y se concentra en los ovarios, hígado y piel del pez.
• Es preparado por chefs especializados por más de 3 años. En la Unión Europea este plato está prohibido.

Camboya

• Las tarántulas se condimentan con hierbas y ajo, y por tradición, se presentan en bandejas de madera.
• Este plato cuesta 50 centavos de dólar y se venden en las calles que desembocan en los templos milenarios.

México

• Chapulín se les llama a los grillos y saltamontes. Se sirven en tacos y son aderezados con salsa picante.
• Crocantes y grasosos, estos insectos aportan sabor a los tacos, colocándolos así como un plato muy codiciado.

Estados Unidos

• Se trata de sesos de ternera. Se fríen y usualmente son acompañados de pan, tomate y lechuga.
• Tiene una textura blanda y de sabor delicado. Además, son preparados en México y Uruguay, en tacos o a la parrilla.

India

• Se trata de la misma orina de la vaca y es considerada como una alternativa saludable por los hindúes.
• Se dice que puede tratar problemas desde la diabetes hasta el cáncer. En Italia la llaman “Acqua di Vacca”.

Perú

• Desde el lago Titicaca, se encuentra el hogar de Coleo Telmatobius (rana), el ingrediente principal del jugo de rana.
• La rana es licuada con el caldo de frijoles, miel, aloe vera y maca. Este último ingrediente es afrodisiaco.

Inglaterra

• Las hormigas tienen un extraordinario punto cítrico y cada botella contiene nada más que 62 hormigas.
• Este peculiar ingrediente al mezclarse con el alcohol, produce incomparables sabores aromáticos.

China

• Es considerado como un “tónico de la salud”. Consiste en sumergir crías de ratón en una jarra de vino.
• Los ratones no tienen más de 3 días de nacidos y se dejan fermentar por un año. Al final, los ratones se pueden comer.